Hojas sin rasgar
miércoles, 23 de enero de 2019
Mi mano tu mano
Cuando apenas nos sospechábamos
mi mano con todos sus tendones y huesos
acarició la tuya y algo,
desde adentro de la piel,
surgió como temblor
y entonces nuestras manos
tejieron los hilos del entusiasmo
hasta el beso primero.
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