viernes, 10 de enero de 2020

En cotidiano

Al inicio el tiempo 
era estar abrazados
y el reloj era una molestia.
Después del vértigo del deseo
el bienestar es posible
con los abrazos controlados
y el reloj visible.

2 comentarios:

  1. Tus textos tienen algo que me enganchan, te sigo.
    Te espero por mi rincón.
    Un saludo.
    https://marca-indeleble.blogspot.com/

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  2. Ese vértigo que se vuelve abismo en el deseo.

    Un beso, y qué bueno volver a leerte, amigo mío.

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